02 de julio de 2024

El operativo «barrido y limpieza» del gobierno nacional tocó las puertas del Parque Iguazú

El gobierno de Milei sigue obsesionado con que «todos curran». Ya hay más de 2 mil despidos ejecutados desde este viernes y esperan que llegue a 5 este lunes.

milei luna park

Tal como adelantaba el vocero presidencial Manuel Adorni el viernes en su habitual conferencia, antes que finalice junio iban a ejecutar el operativo de «barrido y limpieza». Con esa frase tan liviana referían a los despidos que tenían pensado realizar.

De hecho ese mismo viernes, cientos de empleados del programa 144, un plan para proteger a las víctimas de violencia de género y a sus hijos, fueron despedidos desbaratando así la iniciativa y vaciándola de trabajadores.

El SENASA, organismo nacional que cuenta con prestigio internacional y que protege que todos los alimentos que llegan a la mesa de los argentinos – y la de los extranjeros porque buena parte de la producción argentina de carnes se exporta – sean inocuos, es decir esté libre de enfermedades también entró al ojo de la tormenta. Más de 300 personas fueron despedidas y 20 oficinas del país cerradas.

Los gremios ya cuentan más de dos mil echados desde el viernes y estiman que mañana lunes se completarían los cinco mil a los que aspira la Rosada en su plan de despidos.

El Parque Nacional Iguazú: un caso único

El Parque Nacional de Puerto Iguazú, líder en el país de visitas, también estaba «sucio» o así lo entendió el gobierno nacional. Es que el operativo al que Adorni calificó como «barrido y limpieza» también llegó a la zona norte de Misiones.

Pese a ser un parque de los más rentables del país por liderar el número de visitas, en esta oportunidad fueron 3 los despedidos en un lote de personal que no supera los 70 con 6 al menos en cercanías a la jubilación. De hecho el 50% de los trabajadores que garantizan la limpieza, la seguridad y la buena experiencia de cada turista al llegar al parque no tienen relación de dependencia sino que ya están bajo un contrato que limita sus beneficios como trabajadores.

El despido por el despido mismo, un clásico libertario.