Luego del aumento del caudal del río Iguazú, que llegó a los 4.700 metros cúbicos por segundo, el personal técnico y el Cuerpo de Guardaparques del Parque Nacional Iguazú decidieron suspender el acceso al circuito Garganta del Diablo.
Las intensas lluvias registradas en la cuenca del río obligaron a movilizar un protocolo, para garantizar la seguridad de los visitantes, así como del personal que trabaja en el Área Cataratas.
A pesar del cierre en el circuito, el Inferior y el Superior continúan abiertos al público, al igual que el Sendero Verde y el Tren Ecológico de la Selva. Desde el Parque Nacional informaron que las entradas podrán ser revalidadas, para poder visitar la Gargante del Diablo, al momento de ser habilitada.