22 de diciembre de 2024

Pedirán la prohibición mundial de plásticos de un solo uso

Países del mundo se reunirán a finales de mayo en París para la segunda reunión global del Comité Intergubernamental de Negociación (INC-2 por sus siglas en inglés) sobre el tratado de contaminación por plásticos

La WWF, organización que Fundación Vida Silvestre Argentina representa en nuestro país, hace un llamado a los gobiernos para apoyar prohibiciones globales y eliminar de forma gradual los productos de plástico de un solo uso que son «más peligrosos e innecesarios», como cubiertos descartables y microplásticos introducidos, entre otros. La solicitud se realiza antes de las negociaciones de las Naciones Unidas sobre el tratado global de contaminación por plásticos, que se llevarán a cabo en París, del 29 de mayo al 2 de junio de 2023.


Esta solicitud sucede en el marco de una serie de nuevos reportes –solicitados por WWF y realizados por la consultora independiente Eunomia– que identifican los productos de plástico más dañinos que contaminan el ambiente, además de proponer medidas globales de control necesarias para eliminar, reducir o gestionar de manera segura estos plásticos. Se busca que estas medidas sean incluidas en el texto del tratado, que se publicará antes de la próxima ronda de conversaciones, en diciembre de 2023. 

La investigación presenta soluciones sobre cómo abordar los desafíos más urgentes de la contaminación por plástico bajo el nuevo tratado global, dividiendo los productos plásticos en dos grupos: aquellos que pueden reducirse o eliminarse significativamente en el corto plazo (clase I) y los que actualmente no pueden eliminarse o reducirse de manera significativa, pero requieren medidas globales de control para promover el reciclaje y una gestión y disposición segura (clase II). El análisis divide los productos en categorías amplias según el riesgo de contaminación, lo que, de acuerdo con WWF, ayudará a una regulación efectiva a nivel global, en lugar de legislar sobre artículos de plástico individuales, lo cual puede ser complejo y dar paso a posibles vacíos regulatorios. 

Reconociendo la relación compleja, interconectada y ampliamente extendida que la sociedad ha establecido con los plásticos, el análisis también considera las posibles consecuencias no deseadas de eliminar o reemplazar un determinado tipo de plástico en el ambiente, la salud y la sociedad. «Estamos atrapados en un sistema en el que producimos cantidades de plástico mucho mayores de lo que cualquier país puede manejar adecuadamente. Esto ha provocado una crisis de contaminación por plástico que afecta tanto al ambiente como a la sociedad», dijo Marco Lambertini, enviado especial de WWF. 

Aunque el plástico es barato y versátil, con innumerables usos en muchas industrias, casi la mitad se utiliza para crear productos con una vida útil muy corta o que son de un solo uso – pero que pueden pasar cientos de años degradándose. Además, la mayoría de estos se utilizan en países con ingresos altos y medio-altos. Las investigaciones demuestran que, hasta el 2015, el 60% de todos los plásticos que han sido producidos ya habrán llegado al final de su vida útil y habrán sido desechados. A nivel mundial, menos del 10% de los productos plásticos se reciclan. 
A pesar de la regulación y las medidas voluntarias a niveles nacionales, los esfuerzos no han sido suficientes para evitar que el plástico se infiltre al ambiente, y que desde una locación específica se distribuya a cientos o incluso miles de kilómetros de distancia. Los plásticos de un solo uso, los microplásticos y las artes de pesca perdidas o descartadas, conocidas como «redes fantasma», ahora constituyen la mayor parte de la contaminación por plásticos en el océano.