El Ministerio de Seguridad Nacional oficializó un nuevo protocolo técnico para la obtención de muestras de ADN en el lugar del hecho, con aplicación obligatoria para todas las Fuerzas Policiales y de Seguridad Federales. La medida, publicada en el Boletín Oficial bajo la Resolución 1061/2025, busca garantizar la trazabilidad, integridad y validez jurídica de la evidencia genética en investigaciones criminales.
La normativa establece procedimientos estandarizados para la toma, conservación, etiquetado y remisión de indicios biológicos, como fluidos, cabellos, fibras o restos epiteliales, que puedan ser utilizados como prueba en causas judiciales. Además, incorpora una planilla formal de cadena de custodia, diseñada para asegurar el cumplimiento de los estándares legales y operativos desde la recolección hasta el análisis en laboratorios acreditados.
El protocolo se complementa con el marco general de actuación científica en el lugar del hecho, pero introduce especificaciones técnicas que no estaban contempladas en la normativa anterior. Según el texto oficial, el tratamiento de evidencia genética requiere condiciones estrictas para evitar contaminaciones cruzadas, manipulaciones indebidas o pérdida de validez probatoria.
La resolución destaca el valor identificatorio del ADN como herramienta clave para reconstruir hechos, individualizar presuntos autores, excluir personas ajenas al delito, buscar personas extraviadas y esclarecer delitos complejos. En ese sentido, se instruye a las autoridades de la Policía Federal, Gendarmería Nacional, Prefectura Naval, Policía de Seguridad Aeroportuaria y Servicio Penitenciario Federal a adecuar sus normativas internas al nuevo protocolo.
El Ministerio también invita a las jurisdicciones provinciales y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adherir a la medida a través del Consejo de Seguridad Interior, en línea con los avances de la genética forense y la legislación vigente.