El Senado espera este jueves el ingreso del proyecto de movilidad jubilatoria sancionado con 160 votos en Diputados. La iniciativa que mejora en 8,5% las jubilaciones con un costo fiscal del 0,4% del PBI tendría una diferencia «holgada» a favor de su aprobación en la Cámara alta teniendo en cuenta que se logró en el marco de un acuerdo de Unión por la Patria, la UCR, Coalición Cívica y partidos provinciales.
La tensión política en el Senado es extrema. La furia de Javier Milei contra el Congreso por la aprobación en Diputados de la nueva formula de movilidad jubilatoria se cruza ahora con el tratamiento la ley Bases y el paquete fiscal previsto para el miércoles de la semana próxima.
El Presidente considera que los legisladores, y los gobernadores, incumplieron el acuerdo fiscal incluido en el Congreso por el cual el Ejecutivo se comprometió a reponer el Impuesto a las Ganancias para dejar de recursos coparticipables a las provincias.
El enojo de Javier Milei
En el medio, de acuerdo a la lectura política del Gobierno, las provincias le complicaron el equilibrio fiscal a la Nación con el proyecto de aumento en el gasto público del 8,5% de las jubilaciones. Milei enfoca su enojo especialmente en la UCR, y un sector de Hacemos Coalición Federal liderado por Nicolás Massot, por la «traición» en el Congreso antes de la votación de la ley Bases. En ese contexto hoy se cruzará con el gobernador radical de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, en una feria del sector agrícola en la localidad de Armstrong.
Pullaro fue uno de los primeros opositores a la versión original de la entonces llamada ley ómnibus al reclamar cambios en el capitulo de los biocombustibles. Pero también en enero advertía al Gobierno sobre la suba de retenciones que terminó afuera del texto acotado de la ley Bases.
«No voy a acompañar el aumento de retenciones. El Gobierno acierta en terminar con el déficit y el despilfarro del pasado, pero repite el error al ponerle un pie en la cabeza de los que producen, que son el sujeto del cambio que el país necesita. A Santa Fe, el aumento de las retenciones la perjudica seriamente. Somos la segunda provincia exportadora, 4 de cada 10 dólares que necesitamos para sacar al país del atraso, los aportan los santafesinos», había señalado el gobernador de la UCR en ese momento.
Pero Pullaro no es el único «aliado» distante de la Casa Rosada. El gobernador del PRO, Ignacio Torres (Chubut) adelantó ayer que esta a favor de la nueva ley de movilidad jubilatoria y le recomendó al Presidente que no la vete. «Hay que hacer un esfuerzo fiscal para mejorar la movilidad jubilatoria. El veto del gobierno nos mete en una pelea absurda. El Presidente está teniendo reacciones inconducentes porque el Estado ha sido históricamente muy injusto con los mayores. Sube al ring sin sentido a actores a los que va a necesitar», explicó Torres.
Agenda en el Senado
Sin Pacto de Mayo, ni siquiera Consejo de Mayo como anunció el Presidente, los gobernadores se cansaron de esperar y despliegan su propia agenda en el Congreso. El Gobierno incluso degradó el Ministerio del Interior a rango de Secretaría vaciando esa área de caja y capacidad operativa. Entre los mandatarios provinciales reina el desconcierto en cuanto a qué agenda impondrá la Casa Rosada después de la ley Bases ante el recorte de envío de fondos para obra pública, para educación, salud y transporte.
El anuncio precoz del veto presidencial a la suba de jubilaciones hizo cortocircuito con la ley Bases. Cuando la aprobación en general parecía asegurada, ahora algunos «aliados» podrían poner en duda su apoyo. Por eso en el Senado evalúan con especial atención que tipo de tratamiento darle al proyecto de movilidad jubilatoria.
El mejor escenario para La Libertad Avanza es dilatar el inicio de ese debate hasta después de la sesión de la ley Bases prevista para el miércoles próximo. El proyecto aun deber ser ingresado al Senado y luego deber ser girado por Victoria Villarruel a las comisiones, en principio Presupuesto y Hacienda y Previsión Social, para su primer análisis.
El primer poroteo de votos en el Senado demuestra una ventaja «holgada» para que el proyecto de movilidad provisional aprobado en Diputados se convierta en ley. Los bloques opositores estarían en condiciones de sumar, al igual que en Diputados, dos tercios de los votos para insistir con la iniciativa aún ante el veto del Presidente.
Fuente: Ambito
