En un discurso de 80 minutos en la Fundación Mediterránea, el presidente Javier Milei volvió a apelar a la única herramienta que se mantiene consistente en su accionar: las agresiones. En esta oportunidad el primer mandatario libertario dijo que Raúl Alfonsín propició un golpe de Estado contra Fernando de la Rúa y lo hizo enojar a Rodrigo de Loredo.
«Lo muestran como padre de la democracia siendo que fue partidario de un golpe de Estado pero que evidentemente pesificarle la deuda al Grupo Clarín hizo mostrarlo como un héroe».
En este mismo evento lanzó un tiro por elevación a su vice, Victoria Villaruel por medio de críticas a Isabel Perón recientemente visitada por Villaruel. «Teníamos un money overhang, que era el doble del que había en la previa del Rodrigazo, allá en 1975, durante el gobierno de María Estela Martínez de Perón, espantoso gobierno que implicó no solo la Triple A y el decreto de aniquilamiento y algunas aberraciones adicionales, sino que – en el medio – sextuplicó la tasa de inflación y multiplicó por cinco la cantidad de pobres», expresó.
A Milei lo recibió el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora (que habló antes que el Presidente) y la presidenta de la Fundación, Pía Astori.
Las voces del radicalismo se hicieron oir. En principio, Ricardo hijo del ex presidente Alfonsín dijo que a Milei «le va a salir el tiro por la culata». El polémico Rodrigo De Loredo que suele avalar las medidas del gobierno nacional, se puso en la vereda de enfrente en redes sociales indicando que repudiaba y calificó las declaraciones de Milei en Córdoba como «absolutamente disparatadas».
