La pulseada por fondos entre la Casa Rosada y las provincias siguen sumando capítulos En el marco de las negociaciones por el Presupuesto 2025, los gobernadores volvieron a reclamarle a la administración de Javier Milei que se avance en la coparticipación del Impuesto a los Combustibles, un pedido que los distritos arrastran desde hace meses y sobre el que hacen cada vez más énfasis al calor del paso de la motosierra por las cuentas públicas.
Aunque el Presidente ensaya un giro diplomático en su postura y se muestra má recepctivo en la conversación con los mandatarios (en apenas una semana se reunió con nueve de ellos), las numerosas diferencias en el plano económico continúan a la orden del día y están lejos de zanjarse. Ante ese escenario, las gestiones buscan alternativas para engrosar las alicaídas arcas locales y suman exigencias al Gobierno en clave federal.
Una de las opciones que están sobre la mesa es la de coparticipar el impuesto a los combustibles. Lo plantearon ya en distintas ocasiones y contextos diversos jefes provinciales. Esta semana, fue el correntino Gustavo Valdés quien volvió a traer a colación la iniciativa. En el marco de la primera reunión de las mesas técnicas de la Región Litoral, Valdés ponderó la necesidad de «automatizar recursos para la zona», con énfasis en ese tributo.
«Tan solo el 10,4% viene a las provincias. El resto va a Nación. Por lo tanto, si hoy no se van a pagar las cajas jubilatorias y el 35% del impuesto al combustible va para Nación, nosotros pedimos que vaya a masa coparticipable, como pasa con el impuesto al cheque», definió el dirigente de la Unión Cívica Radical (UCR) en diálogo con la prensa. Dijo, además, que la propuesta «busca hacer más razonable un sistema impositivo que estuvo desquiciado durante muchos años y que hoy necesitamos darle normalidad».
En la misma senda había expresado su par entrerriano, Rogelio Frigerio, a mediados de octubre. “Otro ejemplo concreto es el impuesto a los combustibles, que tiene una asignación específica, que es ir a financiar el subsidio al transporte público de pasajeros», comentó en la ocasión. Y completó: «El Gobierno decidió que ese beneficio tenía que ser una responsabilidad de las provincias. Bienvenido sea, pero no te quedés con el impuesto entonces”.
Siguiendo ese camino, el salteño Claudio Mohr, presidente de la Sociedad Anónima de Transporte (SAETA), defendió ante Ámbito la iniciativa: «Sería más justo que ese impuesto se coparticipe y que vuelva a las provincias. Antes, hasta fines del año pasado, todos teníamos, si bien no de manera proporcional ni en paridad, el Fondo Compensador del Transporte y recibíamos algo; hoy ni siquiera», denunció.
En esa línea, Mohr graficó que «todos contribuimos con nuestras cargas de combustibles a engrosar un fondo que luego solo queda en la carga del AMBA. Nos parece ciertamente injusto que tenemos que pagar un combustible más caro por un impuesto que no regresa a la gente del interior». «De un día para el otro, nos quitaron el Fondo Compensador. En el AMBA no solo que permanecieron sino que se multiplicaron los subsidios. Eso es lo que permite poder hacer los acuerdos salariales, que se pagan con recursos de todo el país pero que quedan en el AMBA», reflexionó.
fuente: Ambito