Con la intención declarada de reducir el tamaño del Estado, algo que manifestó claramente en campaña, Javier Milei tomó la decisión de eliminar los «cargos hereditarios» en la administración pública, un mecanismo que permitía a familiares de empleados fallecidos acceder a sus puestos laborales.
La medida que aplica a entes estatales como ANSES, Aduana, y Banco Nación fue anunciada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, y el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, en una conferencia de prensa reciente.
Lo llamativo es que pese a no haber heredado, la gestión Milei tiene a numerosos familiares en acción. Sin ahondar mucho la hermana del presidente, Karina Milei sin formación previa a nivel administración pública o carrera política ocupa el rol de secretaria General de la presidencia y percibe un sueldo que oscilaba en mayo de este año en $3.584.006,00 pesos argentinos.
El caso de Adorni no es tan diferente ya que ubicó a su hermano en el rol primero de asesor del ministerio de Defensa y al cabo de tres meses en el cargo, lo ascendieron a titular de la Unidad de Auditoría Interna de la cartera cobrando en abril de este año 4 millones de pesos.