“No habrá cambios de gabinete, así como tampoco se cambiará el rumbo económico”, dijo una alta fuente de Casa Rosada. Al tiempo que aclara: “todavía no tuvimos tiempo de analizar para determinar los errores”. Además, respecto a eventuales cambios de gabinete, es sabido que la última palabra la tiene el presidente. Por de pronto, en diciembre tanto Patricia Bullrich como Luis Petri dejarán sus cargos para asumir cargos legislativos.
Finalizada la reunión de gabinete se conocieron las primeras decisiones post elecciones. Se decidió conformar “una mesa política nacional”. Según informó el vocero presidencial la misma será presidida por el presidente y estará conformada por: Karina Milei, Guillermo Francos, Patricia Bullrich, Santiago Caputo, Martín Menem y Adorni.
Un dato que muestra una apertura hacia el dialogo fue el anuncio de que “el Jefe de Gabinete de Ministros convocara a una mesa de diálogo federal con los gobernadores”, la pregunta es: ¿incluirán a Kicillof y aceptará la convocatoria?
La actual mesa provincial será ampliada. Actualmente era conformada por Karina, Lule Menem, Sebastián Pareja, Cristian Ritondo. Se infiere que se sumarian participantes de Fuerza del Cielo, agrupación que lidera Santiago Caputo.
Volviendo a eventuales cambios de gabinete, algunos estiman, quizás más como una expresión de deseo, que “no habrá cambios de nombres, pero sí puede “haber cambios de funciones”.
Se especula que Francos tendrá un rol más protagónico, como venía ocurriendo en las últimas semanas. De hecho, este lunes el jefe de gabinete, se comunicó con Kicillof para trasmitirle sus felicitaciones.
Santiago Caputo también se estima retomará su rol de estratega de campaña compartiendo la responsabilidad con los Menem.
Aunque, es de suponer que en la evaluación de daños que hagan respecto al resultado electoral, el gobierno no podrá minimizar el tema de las escuchas donde Lule Menen estaría involucrado en el pedido de coimas.
A pesar de que fue un día con varias reuniones, gabinete nacional por la mañana y por la tarde, lo cierto es que el gobierno aún se encuentra analizando el porqué de la derrota.
Donde también se analizaron los resultados electorales fue en el despacho de Lule Menen quien recibió a Sebastián Pareja, al cual le atribuyen el ser responsable del resultado electoral.
“Algún chivo expiatorio hay que tener”, admitía un experimentado político que ya no frecuenta a los libertarios.
En los pasillos de la Rosada ven difícil que Lule deje su cargo, aunque, en medio del escándalo de los audios, se barajó que pudiera voluntariamente dar un paso al costado hasta tanto la Justicia determine o no su culpabilidad, sin embargo, fue descartada.
Nada cambia
“La política económica no se cambia”, aseveró la fuente que accede al despacho presidencial, en sintonía con lo expresado vía redes con el posteo que el domingo por la noche hizo el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo. “Nada va a cambiar. Ni en lo fiscal, ni en lo monetario, ni en lo cambiario”.
A juicio del entorno del presidente Javier Milei, el gobierno se hace cargo de la “insatisfacción que mostró el electorado” pero aún no queda claro que significará en la práctica. Ya que ratifican tanto al gabinete como al rumbo económico. Es más, sobre este punto insisten que el resultado electoral “no tiene que ver con el rumbo económico”.
Aunque, reconocen y avalan lo expresado por el jefe de gabinete, Guillermo Francos en declaraciones radiales: “Podemos decir que la economía en lo macro está creciendo, pero eso no está llegando a la gente y es importante que llegue, porque si no la gente mira con desconfianza esos logros económicos”. aseveró. Según estas declaraciones parece que sería más un problema de comunicación que de algunos ajustes en el programa económico.
“La mejora en la economía no se percibe aún, a pesar de que los salarios le están ganando a la inflación”, dijo también el jefe de gabinete. De acuerdo a relevamientos privados la mayoría de los trabajadores registrados han perdido frente a la inflación. “Para el 70% de los argentinos el mes se termina el día 20 y vive en la cultura del no puedo; se dicen pobres intermitentes”, explicó Guillermo Olivetto.
No extraña en estas condiciones la derrota electoral del oficialismo en el territorio bonaerense – y sobre todo en el conurbano -.
El Estimador Mensual de la Actividad Económica cayó 0.7% en junio (último dato publicado) y se anticipa que tanto en julio como en agosto sufrió retrocesos intermensuales.
En el sector del comercio se afirma que en las últimas semanas “han caído mucho las ventas” al tiempo que “aumentaron las operaciones en negro”.
Así, en agosto, la venta ilegal callejera en la Ciudad de Buenos Aires subió 10,3% en relación al mes anterior (Cámara Argentina de Comercio).
Fuente: ambito