Este miércoles por la noche la calle frente a la Jefatura de Policía de la provincia de Misiones seguía cortada. Es que más de 300 efectivos, algunos en actividad y otros retirados, se apostaron allí acompañados por sus familias a la espera de que algún referente del gobierno provincial o la policía los reciba.
Uniformados del interior y de la capital provincial se dispusieron a pasar la noche para defender su objetivo: la recomposición salarial. Según indicó, con anterioridad, a este medio el vocero de la manifestación, Ramón Amarilla, la última recomposición salarial que tuvieron fue entre el 9 y 12 de octubre, con la promesa de que iban a tener una suba entre los meses de noviembre y diciembre, pero esto no se dio.
En consecuencia, la medida de fuerza persiste a la espera de alguna señal oficial. Trascendió que la conversación sobre el aumento en los salarios sería recién el 5 de febrero pero muchos dejan oír el descontento por el «desprecio» que se observa tanto desde el jefe de la Policía como de los que actualmente están gobernando.
«Resistir, vamos a aguantar», decían varios esta noche cuando las fuerzas parecían flaquear y tras la fuerte tormenta de hoy, las ganas de descansar eran muchas. «Hasta que no nos reciban no nos vamos a ir», se escuchó también y los aplausos le dieron el cierre final.
