El pasado viernes miles de usuarios del servicio de colectivo se vieron abandonados ya que la empresa, Grupo Z, decidió de forma sorpresiva recortar líneas y frecuencias en pos de presionar por los subsidios.
En horario pico los vecinos de la ciudad se encontraron con que el colectivo no pasaba y debieron comenzar a caminar a sus hogares, o buscar una alternativa para lograr el regreso.
Y si bien el Gobierno había estipulado que no podían tomar este tipo de medidas antes de otorgarle el aumento solicitado, la empresa incumplió totalmente y desde el Municipio se mantuvieron impávidos.
Indicaron fuentes municipales que desde el Grupo Z no se habían comunicado antes de tomar esta medida, pero que la explicación que entienden está vinculada a la no percepción de los subsidios nacionales.
Al verse totalmente indefensos, los usuarios recurrieron a la Defensoría del Pueblo para que interviniera y se restablezca el servicio.
Vale recordar que hoy el pasaje en Oberá cuesta $90 con tarjeta o código QR y sino $120. Luego de lo debatido y aprobado por el Conejo, desde el 1 de octubre pasará a costar $110 y $150 respectivamente. Y en diciembre llegará a $150 y $200.