Una convocatoria en la renombrada plataforma Change.org que buscaba promover que los misioneros – por medio de su firma digital – se manifiesten en contra de la leyenda que reza que Misiones es una “provincia start up”, desató una tormenta dentro de las filas renovadoras.
Como por arte de magia, una iniciativa digital que al momento de ser replicada por medios de comunicación misioneros solamente contaba con 3.500 votos, logró el efecto tsunami: en la última semana las búsquedas en Google arrojaron un total de 680 mil resultados. De estos, más del 80% responden a publicaciones de portales de noticias – los mismos, que antes ponían en duda el nuevo cartel – ahora hablando maravillas de la provincia start up.
¿Es start up o no la Provincia de Misiones?
Misiones viene realizando hace más de una década inversiones en materia de tecnología y capacitación en áreas muy solicitadas en la escena nacional e internacional.
Proyectos – que hoy son realidad – como el Silicon Misiones o el Polo Tic donde de manera gratuita todos los misioneros mayores de 18 años pueden acceder a cursos y carreras cortas que los preparen para los puestos del futuro, es un hecho que no puede discutirse. Escuelas de robótica, de innovación, leyes que amplifican acceso como la Ley VI N.o 2012 de Educación Disruptiva facilitan la formación en nuevas tecnologías y representan un signo de la voluntad de la gestión renovadora.
Sin embargo, estas iniciativas no son suficiente ya que las asimetrías entre la capital provincial y el resto de Misiones son tangibles y urge que el tablero se equilibre.
Recientemente y con vistas a la próxima elección, este Gobierno ha puesto foco en escuchar las necesidades de los habitantes de Iguazú, tierra que contiene a una de las Maravillas del Mundo pero también puede ser fácilmente reconocible por el mal estado de sus calles y las altas tasas de desempleo sumado a una inestable calidad en la prestación del servicio de luz y agua. Este ejemplo es indicio de otras realidades que se viven en Misiones y que siguiendo con la leyenda de provincia start up, hacen que el clamor popular esté justificado.
¿Qué dicen los misioneros sobre el cartel del arco?
Con subjetividad plena y en Change.org hoy ya más de 9 mil misioneros dedicaron palabras en contra del nuevo cartel. Aspectos relativos al “sentir misionero”, al uso de palabras extranjeras que no todos comprenden y el uso “de campaña” son algunos de los detonantes del enojo.
Sin embargo, no sólo de gustos viven los reclamos; más de uno denuncia que numerosos puntos de la provincia no cuentan con el suministro de luz de forma constante, o que las instituciones educativas públicas no cuentan con buena formación en inglés o que simplemente “no entienden qué significa ser una start up” porque no lo viven.
¿Cuál fue la reacción del Gobierno con la polémica?
Una foto en Instagram del candidato a vice – gobernador Lucas Romero con una remera blanca en la que se leía en ingles “Yo amo start up” lejos de aquietar las aguas, provocó el enojo de muchos. Desde el 25 de enero, fecha de la publicación del diputado provincial, el número de firmas casi se duplicó en comparación al día que empezó a circular la noticia.
Como contrapartida, el incremento de las notas a favor de la auto declaración de start up fue in crescendo mientras que el corolario se dio con una nota de Clarín publicada en su medio online el 29 de enero donde repite lo dicho por los medios locales repasando una a una las iniciativas que, existen, pero lejos están de alcanzar para conformar realmente una provincia start up que promueva un ecosistema de innovación 360º por medio de incentivos a privados que pueda equilibrar la balanza en todo el territorio.
