La causa Sur Finanzas entró en un nuevo umbral este miércoles, cuando la Justicia dispuso allanamientos en empresas y cajas de seguridad. El avance se dirigió hacia objetivos ligados al financista Ariel Vallejo, figura cercana a Claudio “Chiqui” Tapia, presidente de la AFA, en busca de fortalecer el caudal probatorio.
Las medidas alcanzaron oficinas y firmas vinculadas a la financiera, mientras se inspeccionaban cajas de seguridad en bancos que podrían resguardar documentación o valores decisivos. Cada ingreso se convirtió en un gesto de desvelo, un intento por descifrar la trama oculta de la operatoria investigada.
La secuencia se desplegó tras los 35 procedimientos simultáneos del martes en la sede central de la AFA, el predio de Ezeiza y varios clubes del fútbol argentino. El juez Luis Armella ordenó nueve nuevos ingresos a domicilios de la financiera, después de haber avanzado sobre 17 instituciones deportivas.
En paralelo, se dispuso revisar otras empresas conectadas con Sur Finanzas, estructura conducida por Vallejo. La fiscal Cecilia Incardona sostiene la causa por presunto lavado de dinero y marca que estos procedimientos son claves para definir el alcance de la red. La investigación se expande como un mapa de vínculos, donde cada hallazgo abre otra puerta.
