El vínculo entre el gobierno de Javier Milei con China empezó con el pie izquierdo. A menos de dos semanas de asumir, los representantes del gobierno de Xi Jinping no activaron la extensión del acuerdo destinada a saldar vencimientos con el FMI.
El swap por el valor de US$6.500 millones anunciado por Massa y Alberto Fernández en octubre tenía como función abonar los vencimientos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el marco del préstamo stand-by que contrajo el gobierno de Mauricio Macri en 2018. Eran US$2.590 millones a cancelar el 31 de octubre y US$826 millones el 6 de noviembre.
Sin embargo, el anuncio de este acuerdo, que llegó sólo unos días antes del 22 de octubre, empezó a resquebrajarse cuando Javier Milei ingresó al balotaje y luego ganó la elección. Es que el político libertario declaró en más de una oportunidad que el Gobierno chino es un “asesino” y ha proclamado que el pueblo chino “no es libre”, pese a que el gigante asiático es el segundo socio comercial de Argentina y el primer destino de las exportaciones agrícolas.
En la asunción de Milei, pese a las agresiones del libertario, la República Popular de China envió un representante pero luego las reuniones mantenidas con la canciller Diana Mondino y sus declaraciones sobre el swap y el posible reconocimiento argentino a Taiwan alejaron a los asiáticos y a su buena voluntad. Es más, en las últimas horas China convocó de urgencia a su embajador en Argentina, Wang Wei, para que informe cuál será el tinte de la situación bilateral.
Cabe recordar que el conflicto entre China y Taiwan tiene larga data y en los últimos años vivió nuevas crispaciones. El año pasado, en el mes de octubre, el mandatario de la República Popular China advirtió que recuperaría Taiwán, “por la fuerza si es necesario”.
Hoy solamente reconocen a Taiwan 12 países: Belice, Guatemala, Haití, Paraguay, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Suazilandia, Palaos, Tuvalu, Islas Marshall, Nauru. Se puede mencionar al Estado del Vaticano como el 13vo.
La situación hoy, además de ser delicada en lo económico, supone otra marcha atrás para Javier Milei quien debió recular enviando una carta a Xi Jinping pidiendo que interceda para reactivar el swap.
