Con la caída del consumo de carne vacuna, que en 2024 tocó mínimos históricos en el país, los precios de los cortes subirán entre un 5% y 7%, debido a una importante reducción en la oferta de hacienda. Los carniceros advierten que ‘cada vez es más difícil conseguir productos’.
En las últimas semanas, los frigoríficos aplicaron un aumento del 7% por la caída en la oferta de hacienda en el Mercado Agroganadero de Cañuelas (MAG). Este aumento ya se refleja en algunas carnicerías, aunque la mayoría de los locales lo verá a partir de la próxima semana.
«Los precios están por las nubes, ya no sabemos qué hacer. La situación se está volviendo cada vez más caótica. Es domingo y no hay nadie en la carnicería; todo está mucho más complicado. En enero y febrero el consumo baja porque mucha gente está de vacaciones, y encima los precios siguen subiendo», explicó Marito Laurens, dueño de una carnicería en El Palomar
El carnicero detalló que el costo de una media res es de $6.000 por kilo, lo que lleva el precio del asado a $12.000. «Antes estábamos pagando $5.300 y ahora pasamos a $6.000, lo cual es un aumento impresionante.
Laurens recomendó reemplazar los cortes más caros, como el lomo y el peceto, por opciones más accesibles. «Por ejemplo, la palomita o la cuadrada son excelentes para hacer un buen churrasco a la criolla», sugirió. También mencionó el centro de entraña, que cuesta $6.500 el kilo, y comparó con el precio de la nalga de cerdo, que cuesta $7.900, mientras que la milanesa de nalga llega a los $13.000. «Es cuestión de cambiar el enfoque y buscar alternativas», concluyó.