30 de octubre de 2025

El Banco Central proyecta retomar la acumulación de reservas desde 2026

La estrategia busca preservar la estabilidad monetaria y avanzar hacia la remonetización de la economía sin presionar sobre los precios.

El vicepresidente del Banco Central, Vladimir Werning, presentó ante inversores internacionales el esquema monetario previsto para la próxima etapa del programa económico. La autoridad monetaria anticipó que retomará la compra de divisas a partir de 2026, en función de las condiciones de mercado y con una estrategia de intervención acotada.


Werning explicó que el organismo priorizó la estabilidad nominal y la moderación de la emisión, sin acelerar la acumulación de reservas en la coyuntura actual. El objetivo inmediato fue preparar el terreno para una futura remonetización de la economía, basada en una mayor demanda de pesos y en la recuperación de la actividad.

Condicionalidad cambiaria y prudencia fiscal

El Banco Central definió que solo intervendrá en el mercado cuando el tipo de cambio mayorista se ubique cerca del piso de la banda de flotación. Esta postura implica que no habrá compras anticipadas de dólares, sino operaciones puntuales que no generen presiones inflacionarias ni alteren los equilibrios monetarios.


Durante la exposición, Werning destacó la reducción del stock de pasivos remunerados y el cumplimiento de pagos al FMI sin utilizar desembolsos extraordinarios. Subrayó que el esquema de acumulación previsto se apoya en tres pilares: recuperación de exportaciones, normalización del flujo de capitales y menor necesidad de importaciones energéticas.

Coordinación con el Tesoro y horizonte 2026

En paralelo, el Ministerio de Economía analiza un rango de precios para reactivar la compra de divisas por parte del Tesoro, con recursos propios y sin financiamiento externo. La estrategia apunta a recomponer reservas en momentos de holgura fiscal, sin generar distorsiones ni presionar sobre los precios internos.


La recomposición de reservas desde 2026 se proyecta como componente central del programa de estabilización. El fortalecimiento del balance del Banco Central será clave para consolidar la credibilidad monetaria y reducir la brecha cambiaria. La transición requerirá disciplina fiscal y coordinación estrecha entre organismos.

Mensaje al mercado: previsibilidad y gradualismo


El Banco Central transmitió a los inversores que mantendrá una política de flotación administrada, con margen de maniobra previsible y sin emisión asociada a las intervenciones cambiarias. Las compras de divisas se activarán solo cuando el contexto lo permita, en un marco de estabilidad de precios y superávit externo genuino.