El acuerdo firmado por el gobierno argentino con el Fondo Monetario Internacional (FMI) no deja mucho espacio para bajar la presión tributaria, ya que a partir de 2026 y 2027 plantea metas muy ambiciosas de superávit fiscal.
Eso no implica que no se puedan bajar algunos impuestos, como plantea el presidente Javier Milei y que es uno de sus principales promesas de gobierno. Pero si así los hiciera, en el marco de una reforma impositiva, eso implica que van a tener que subir otros.
El acuerdo plantea que el Gobierno tiene que presentar a fin de año un superávit primario del 1,3% del Producto Bruto Interno (PBI) aunque Milei ha dicho que va por uno de 1,6%. En 2026 el supérávit debe subir al 2,2 y en 2027 a 2,5%, al igual que en 2028 y 2029. Este año el superávit financiero, es decir, tras el pago de intereses de deuda, puede ser cero, al igual que en 2026. En 2027, 2028 y 2029 tiene que ser del 0,4% del PBI.
Milagros Gismondi, economista de la sociedad de bolsa Cohen Argentina. considera que las metas son optimistas aunque señala que “más allá del acuerdo con el Fondo para ir bajando la deuda debería haber incluso más superávit”.
“Es desafiante considerando la fórmula actual (de ajuste de jubilaciones), cuando baje la inflación, el gasto previsional se mantendría estable, por lo que en el resto de las cosas habría que seguir haciendo un ajuste fiscal”, explicó en una charla con Ámbito.
Gizmodi consideró que “no es menor pensar en un 2,5%” de superávit primario para la Argentina aunque no es tarea tan sencilla sobre todo pensando que en algún momento debe haber un escenario de baja de impuestos que es tan importante para este Gobierno”.
“Más allá de que puedan mejorar la carga tributaria, bajen los distorsivos y suban otros lo cierto que es difícil pensar en una baja más o menos agresiva de impuestos considerando que hay que ir teniendo mas superávit primario”, añadió.
La reforma tributaria del Gobierno
El presidente Javier Milei planteó una reforma tributaria, que en principio no podría reducir la carga total, sino rebalancear lo mismo entre tributos distorsivos, que encarecen directamente los precios, como Ingreso Brutos o las retenciones a las exportaciones, e impuestos que resulten no distorsivos.
La idea sería que sólo seis o siete impuestos logren recaudar lo mismo que hoy a nivel nacional lo hacen unos 30 tributos y tasas. No es sencillo para el Gobierno porque necesita del consenso de gobernadores. Por ejemplo, se habla de reemplazar Ingresos Brutos por un IVA provincial.
El Gobierno ya superó la meta del primer trimestre
De acuerdo con un análisis del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), al cierre del primer trimestre el ministro de Economía Luis Caputo levantó aproximadamente $710.000 millones por sobre la meta. El FMI dice que Argentina tendría que haber logrado entre enero y marzo un saldo a favor de $3,64 billones, pero consiguió $4,35 billones.
Es de recordar que en junio de 2025, el Gobierno volverá a restituir las retenciones a las exportaciones que redujo el año pasado para estimular la liquidación de dólares.
Fuente: ambito