En un fallo inédito, en el que se actuó con una premura y una dureza llamativa, el Comite de Disciplina del regional decidió sancionar a Capri con tres fechas de suspensión para la cancha y dos fechas de suspensión para 23 jugadores. A Aranduroga le cupo la misma sanción en cuanto a los jugadores y dos fechas para jugar de local.
Conocida la medida, los dirigentes de Capri, se movieron para lograr que le permitan afrontar el cotejo con San José, previsto para este sábado a las 16:15, ya que la institución posadeña ya tenía preparado el protocolo del viaje para mañana a las 15 con el listado de jugadores definidos, por lo que hubiera sido otro contratiempo -y van- para el representante misionero.
Indudablemente los integrantes de dicha comisión no se tomaron el trabajo de revisar las imágenes de los videos, donde se ve claramente que el jugador que inició la pelea fue un jugador de Aranduroga que golpeó arteramente y sin situación de juego a Sebastián Falero. Por ese hecho y por la falta de compromiso de Leandro Peker para la continuidad del juego, Capri resulta el equipo más perjudicado a todas luces. Le dan por perdido el partido, que estaba a punto de lograr igualarlo con 13 minutos por jugar, le suspenden la cancha tres fechas y 23 jugadores por dos fechas, como si todos hubieran participado de la trifulca.
Evidentemente a quienes componen ese tribunal, no les importa mucho la suerte que pueda correr un club que representa a Misiones.
La decisión generó disgustos y enojos en ambos equipos que deberían jugar sus próximos partidos, los correntinos contra Taraguy y los azurros en Asunción ante San José,
De la sanción se desprende que los 46 integrantes de los equipos participaron de la pelea, cosa que no fue real, pero para lavarse las manos le caen a todos en lugar de hacer un análisis pormenorizado y profundo de las imágenes, porque el informe del juez principal no puede ser determinante, ya que no observó fehacientemente lo que sucedió, ni quienes intervinieron
Los tres juegos de local deberá hacerlo en cancha de Tacurú, Centro de Cazadores o Lomas.
Decir que con esta sanción, las posibilidades del Capri de acceder a los tramos finales es una utopía, no escapa de una cruda verdad. Los dirigentes de la institución posadeña estaban realizando ingentes esfuerzos para conocer los pormenores de la decisión y actuar en consecuencia para defender los intereses del Club
