Bajo una intensa lluvia y un campo de juego con mucha agua, Capri derrotó a Tacurú en su segundo partido de la Reválida del regional de rugby del NEA. De esta forma el azurro prácticamente aseguró su permanencia en la Zona Campeonato, ya que en el partido adelantado había superado a Aguará de Formosa, y en la última fecha deberá visitar a Caza y Pesca de la misma provincia.
A pesar de la lluvia, mucho público de ambas parcialidades se acercó a la Chacra 156 para ver el partido; un «clásico» del rugby posadeño, que comenzó con mucha intensidad y nerviosismo por lo que estaba en disputa para ambos.
En el arranque el que se plantó en campo rival fue el local, que intentó sacar potencia a través de sus forwards, por lo que buscó avanzar con mauls, y forzar el juego a los line para, tras conseguir la guinda, avanzar con el pack bien enfocado. Con esa tesitura de juego llegó el try de Estigarribia a los 13 minutos, tras un buen pase a la salida de la formación por parte de Ceccarini.
En esa jugada, lamentablemente quedó tendido Lucas Tannuri del local, que debió salir en camilla y posteriormente ser trasladado a un nosocomio, por un presunta factura de peroné.
Siguió insistiendo el azurro pero aparecieron problemas en el juego de manos y las imprecisiones propias del clima con el que se jubaba. La hormiga comenzó a mover mejor la ovalada, a partir del buen criterio de David Letviñiuk que con Martín Bianchi armaron un buen tándem para que los tres cuartos comenzaran a buscar escapar a la marca en base a velocidad y buen acompañamiento. De esa forma el juego empezó a volcarse en terreno de Capri.
Hasta que a los 30, y aprovechando el estado del campo de juego Letviñiuk intentó un autopase sobre la zona derecha, que con mucha angustia logró controlar la defensa del local, pero un minuto más tarde tras una mala salida de Capri – ya que la pelota estaba ingobernable – el mismo jugador, frente a los palos se colgó un pase para apoyar el try de su equipo, al que él mismo le agregó dos puntos más para pasar al frente 5 a 7, cuando jugaban con uno menos por una amarilla.
Prestándose la pelota producto de caídas y malas decisiones, concluyó la etapa con Tacurú arriba por dos.
En el inicio del complemento, el tiempo amenazó con amainar, pero duró poco y la lluvia volvió a caer con fuerza. Tacurú comenzó a sentir el desgaste y ya no tuvo la precisión del primer tiempo para mover la pelota, al tiempo que su apertura tampoco podía darles destino preciso a los tiros al touch.
En esa dificultad climática, Capri comenzó a empujar en los scrums con la fuerza de su pack, y llegaría el segundo try por intermedio de Ceccarini a los 3 minutos para pasar al frente por 10 a 7.
El juego se llenó de errores e infracciones y casi no llegaba a las cinco yardas rivales con posibilidades ciertas. En el recambio de piezas, Capri no decayó en la potencia de los grandotes, y de a poco comenzó a inclinar la cancha, a fuerza de mejorar en los lines out para conseguir avanzar con posibilidades, hasta que a los 26 Santiago Gamarra Denis, que controló un pase complicado, se metió al ingoal visitante y con un giro apoyó el tercer try de Capri, para establecer un marcador de 15 a 7.
Tacurú sintió el impacto, lo fue a buscar con tesón, pero Capri se plantó firme y tackleo permanentemente para evitar la escalada de los tres cuartos. A los 30´ tras una salida errónea de Capri, Letviñiuk dispuso de un penal, pero, su disparo se fue cerca de la H.
Capri esperaba con paciencia, y buscaba con patadas profundas aprovechar el adelantamiento de su adversario, pero le faltaba precisión, hasta que dudó la defensa de Tacurú, y Sebastián Falero, con tiempo cumplido, reaccionó con rapidez, se fue sólo, y apoyó bajo los palos acompañado por el delirio de la hinchada local y con su conversión cerró el marcador y el partido 22 a 7.
