Soldado de cientos de batalles defendiendo la casaca franjeada, caudillo, capitán y portador de un apellido histórico de Guaraní Antonio Franco, pero que también, fuera de la cancha, supo cosechar grandes amigos.
Y fueron ellos, los que algunas vez transpiraron la misma camiseta y otros que fueron rivales, se unieron a “dar una mano” solidaria y en la manera en la que mejor se manejan, organizando un velada futbolística.
Fue en cancha de Guaraní, la cuna de Ruben, jugaron las chicas de Mitre y Guaraní, luego, lo hicieron los infantiles y finalmente, los ex jugadores franjeados y auriazules volvieron a salir del túnel y pisar la gramilla de Villa Sarita. Poco importó si el ritmo ya no es el mismo, ni las nanas propias de la edad o los kilos que dibujan otra silueta. La idea fue ayudar a uno de los suyos.
Excelente iniciativa de este grupo que extendió su mano solidaria!!!!!