01 de julio de 2025

El entrenador del fútbol femenino acusado de abuso sexual será excarcelado bajo palabra

Continuará supeditado al expediente de las jugadoras, por lo que deberá permanecer alejado de las denunciantes.

En las próximas horas, el entrenador de fútbol femenino acusado por delitos contra la integridad sexual de las jugadoras sería excarcelado bajo palabra, con las restricciones de acercamiento a las denunciantes y respectivas familias.

Al menos 16 jugadoras lo apuntaron de acoso sexual y maltrato, por lo que no podrá acercarse a las víctimas ni salir del país, según lo confirmó este miércoles la decisión judicial. Llevaba privado de su libertad por 26 días, tras la denuncia que había recibido en octubre.

El fiscal Christian Oscar Antúnez Nerenberg coincidió con el juez de Instrucción 2, Juan Manuel Monte, pero Nerenberg agregó una serie de restricciones, en donde se destaca la prohibición del acercamiento a las jugadoras y sus familiares.

El 17 de octubre pasado fue despedido del Club Educación, tras las declaraciones de 16 jugadoras de la institución, quienes rompieron el silencio y detallaron el abuso que habría sufrido una de ellas, además de  situaciones de acoso y maltrato permanente.

La excarcelación no es bajo fianza o caución real sino juratoria, bajo palabra y con las restricciones pertinentes. Las denuncias de las jugadoras fueron de menores de edad, entre los 12 y 17 años, y una de ellas se animó a contarle a su madre lo que sufrían junto con sus compañeras.

El acusado ya tenía casos y denuncias anteriores, de una jugadora de un club de la Liga Posadeña de Fútbol. “Cuando me enteré de las denuncias de las chicas ahora, fue como revivir todo el dolor de hace diez años. Este tipo no cambió para nada me di cuenta porque charlé con las niñas y utilizó el mismo modus operandi, parece un amigo, todo bien y perfecto, después comienza a tratarte mal y a apartarte de tus compañeras, de presionarte con la homosexualidad, estaba arriba tuyo todo el tiempo con eso, te hacía sentir terror, te gritaba y manipulaba. Era un monstruo y para afuera parecía bueno, intachable y perfecto, no levantaba la voz”, comentó la jugadora, que lo denunció en 2013, sín efecto en su queja.