Con gran convocatoria de ambos clubes, se disputó anoche en cancha de la Inmaculada la segunda final entre Luz y Fuerza y Mitre. Las auriazules gritaron CAMPEONAS cuando el marcador tenía algunos segundos por correr pero la diferencia era insalvable para las eléctricas; 36 – 53.
Mitre ya había conseguido el primer triunfo de la serie en su cancha y por eso, las anfitrionas debían vencer para alimentar la esperanza. Sin embargo, salvo el primer cuarto que finalizó 8 – 10, para el resto de los tiempos Mitre ya había comenzado su escalada y se distanciaba en el marcador.
La primera mitad del juego finalizó en 14 – 21 y Mitre se retiraba envalentonada al descanso largo.


Tras el break, ambos equipos regresaron a la cancha y las eléctricas le imprimieron velocidad al juego que era bloqueada insistentemente por Mitre cuando, al fallar tiros, tomaban los rebotes para hacerlos suyos.
El último cuarto comenzó con un Luz y Fuerza sólido que apoyado por el aliento de su hinchada se sintió capaz y pese a la diferencia, arrinconó a Mitre que temía que se le escape. Jugadas rápidas, estudiadas y en equipo le ponían picante y acercaban a Luz y Fuerza.
Sin embargo, ante el aliento local y los puntos eléctricos, las de Mitre aceleraron y de la mano de la ágil Johana Stockmanss y la joven Isabella Spyridacos recuperaron el ritmo y volvieron a dominar. A falta de 4 minutos, Luz y Fuerza quiso imprimirle velocidad a su juego y pese a lograr llegar al arco rival, el apuro y los nervios le jugaron varias malas pasadas que impidieron que conviertan los triples, varios, que las hubieran acercado a una chance.
Gran momento del básquet femenino misionero, con equipos sólidos y apoyo de sus clubes para seguir creciendo y profesionalizándose.