03 de diciembre de 2025

Se presentaron acciones regionales de adaptación y mitigación frente al cambio climático

La metodología incluyó presentaciones técnicas, trabajos grupales por provincia y debates regionales para consolidar un enfoque común de acción.

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) junto al Ministerio de Salud Pública de Misiones llevan adelante, desde hoy y hasta el 5 de diciembre en Posadas, el Taller Regional NEA–NOA de Salud Ambiental, un espacio de trabajo técnico orientado a fortalecer las capacidades provinciales en mitigación y adaptación frente al cambio climático dentro del sector salud.

Alejandra Ferrero, consultora ambiental de Determinantes Ambientales de la Salud y Cambio Climático de la OPS, destacó que este encuentro representa “la continuidad de un proceso iniciado en años anteriores, que busca consolidar la formación técnica y operativa de las provincias para integrar el enfoque climático en los establecimientos de salud”.

Ferrero explicó que las actividades del 2025 se enfocaron en completar el ejercicio de fortalecimiento de capacidades con las provincias del NEA (Corrientes, Misiones, Chaco y Formosa) y del NOA (Jujuy, Catamarca y Tucumán).Este proceso surge de una experiencia piloto desarrollada junto al Ministerio de Salud de la Nación y las provincias de Tucumán, Neuquén y Misiones, que permitió avanzar en el cálculo de la huella de carbono y en la evaluación estratégica del riesgo de emergencias y desastres a través de la herramienta STAR-H, impulsada por la OPS.

“Este año dimos continuidad a todo lo vinculado con la huella de carbono en establecimientos de salud y con la evaluación estratégica del riesgo, para mitigar el impacto del cambio climático en el sistema sanitario”, remarcó Ferrero.

Durante el taller, cada provincia presentó los avances de los establecimientos seleccionados para la estimación de emisiones.

En el caso de Misiones, participaron el CAPS 33 de Posadas y el Hospital SAMIC de Eldorado. Los equipos técnicos expusieron sus resultados preliminares, identificaron las principales fuentes de emisiones y analizaron oportunidades de reducción. Se trabajó en la integración entre mitigación y adaptación, articulando la huella de carbono con los diagnósticos de riesgo obtenidos mediante STAR-H. El objetivo, según Ferrero, es “desarrollar estrategias de trabajo a futuro que permitan que los establecimientos y las provincias incorporen estos resultados en sus planes de resiliencia y sostenibilidad”. Durante estos tres días, representantes de las siete provincias avanzaron en: Elaboración y revisión de planes de acción provinciales e institucionales. Identificación de lecciones aprendidas y oportunidades comunes. Definición de recomendaciones específicas para reducir emisiones y fortalecer la resiliencia de los establecimientos frente a emergencias climáticas.

Integración del enfoque de cambio climático en los sistemas de salud del NEA–NOA.

La metodología incluyó presentaciones técnicas, trabajos grupales por provincia y debates regionales para consolidar un enfoque común de acción.

El taller culminará con una agenda de próximos pasos, orientada a que las provincias puedan avanzar en la institucionalización de la medición de huella de carbono. La incorporación de los riesgos climáticos en la planificación sanitaria. La implementación progresiva del Marco Operativo de OPS para sistemas de resilientes al clima y sostenibles.