En declaraciones a Télam, desde la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) se destacó no sólo el crecimiento exponencial de casos de contagio de dengue sino también que el 2023 fue el primer año en que hubo notificaciones todo el año incluido el invierno. Esto ocurre por primera vez en el país.
Por otro lado, en consecuencia, reflexionaron que salvo en la región patagónica, en el resto de las zonas de Argentina se está convirtiendo en una enfermedad endémica.
«El avance del mosquito se debe al cambio climático, porque hay mayor humedad y aumento de la temperatura en latitudes más hacia el sur y esto permite la vida, sobrevida y reproducción del mosquito vector, Aedes aegypti», agregó la especialista en infectología, Leda Guzzi.
Los especialistas coincidieron en que la única forma de evitar el incremento de casos es en la descharrización, que consiste en eliminar los criaderos de mosquitos de cada casa, departamento o lote. Esto sucede porque el mosquito deposita sus huevos en agua limpia de no mucha profundidad por lo que cualquier recipiente capaz de acumular agua puede convertirse en un criadero.
El ciclo de vida del huevo a larva, a pupa y luego a mosquito adulto volador es de 8 días y ocurre en el agua. Esto, con la intensidad de las lluvias que se experimentan en Misiones, hace que la tarea de eliminación de reservorios de agua donde el mosquito pueda dejar los huevos tiene que hacerse día por medio cambiando el agua de floreros, dando vuelta baldes o macetas vacías en patios, cortando el césped y recambiando el agua de los bebederos de mascotas.
