Con la presencia de productores yerbateros en la ciudad de Buenos aires, y un tractor que simboliza el esfuerzo y el trabajo en el agro misionero, se entregó ayer en la mesa de ingresos de Casa Rosada una nota dirigida al presidente de la Nación, Javier Milei en la que se le solicita la urgente designación del presidente del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) y se reestablezcan sus funciones tal como lo establece la Ley 25.564.
Hugo Sand y Jonas Peterson son las caras visibles de este reclamo, y se preveia que recorran algunas calles de la capital arrojando yerba como una manera de visibilizar el reclamo de los productores por los bajos precios que se están pagando por la materia prima ante la falta de regulación de los precios y el aprovechamiento de los industriales ante esas circunstancias, ya que pagan mucho menos del precio, en plazos que ellos imponen, pero la yerba en las góndolas no baja sus valores, e incluso siguen aumentando.
Es que sostienen, y no ellos solos, que desde el gobierno nacional, sólo se pretende favorecer a lois grandes grupos económicos y de poder en desmedro de los trabajadores.
En la nota se resalta que «la desregulación por medio del DNU 70/23 se eliminaron funciones del INYM que son centrales para el sustento de miles de familias del sector yerbatero. Las consecuencias de tal medida se evidencian en este momento en la baja de prercios y los tiempos de pago de la materia prima a los productores, con impacto negativo en la economía regional. Este situación, producida desde que asumió como presidente de la Nación, puede y debe revertirse, mediante la designación de un presidente en el INYM y la restitución de todas sus funciones».
«El INYM es un Ente de Derecho público no ESTATAL. Se financia exclusivamente con la tasa de Fiscalización que rige únicamente para la comercialización dentro del país, no estando gravada la exportación. es decir NO DEPENDE DEL ESTADO» y agrega la misiva «en sus 22 años de existencia generó resultados positivos para todos los eslabones, desde cosecheros hasta la molinería. Todo esto sustentado con datos fehacientes».
