El Auriazul ganó un solo partido en diez presentaciones y atraviesa un momento difícil en la Liga Federal. A pesar de los resultados, la dirigencia apuesta al proyecto, respalda al cuerpo técnico y al plantel profesional, dejando de lado la usina de rumores que se había planteado antes del clásico con Tokio, que hablaban de la posibilidad de cambio del entrenador e incluso algún corte de jugadores, pero que la propia dirigencia no había puesto claridad al respecto.
Ahora los dirigentes mitrenses dejan en claro que no se plantean cambios y “se sigue respaldando al proyecto, al cuerpo técnico y al plantel, más aún, viendo el cambio de actitud y el orgullo demostrado en el clásico ante Tokio”, un partido que se escapó por muy poco.
Sebastián Macias, vicepresidente del auriazul , reconoce que “es un momento emocional difícil, pero que va de la mano con un crecimiento y maduración institucional, en la que se nota el progreso en las divisiones inferiores”. Allí resalta “el sentido de pertenencia logrado en muchos chicos, tomando como espejo a las figuras del plantel profesional, más allá de los resultados”.
La dirigencia apuesta a un crecimiento institucional integral, con una evolución conjunta de todas sus disciplinas (fútbol, básquet, hockey, pelota paleta). A diferencia de otros años, hay un desarrollo deportivo conjunto, con una atención integral de todas las disciplinas.
“El proyecto está en marcha y no vamos a cambiar el rumbo de las ideas, corregiremos lo que haga falta para que los resultados lleguen, pero lo más importante es fortalecer las bases de todas las categorías y disciplinas, además de los equipos de trabajo del club. La familia del Mitre alberga a más de mil jugadores y cuatro decenas de profesionales en todas sus disciplinas, lo cual nos motiva a trabajar más duro cada día”, expresaron los dirigentes.
El próximo desafío del equipo posadeño será como visitante, el jueves frente a Hindú, en Resistencia.
