Con la certeza que no fue superado por el rival, en el empate 0 a 0 del pasado domingo, el elenco auriazul, viajará con muchas expectativas para traer la clasificación para la finalísima por el Ascenso.
Según los antecedentes y observando los partidos anteriores de Defensores, el equipo no cambia mucho jugando de local, si bien es ordenado defensivamente y con mucha gente en la mitad de la cancha, lo lastima en ofensiva.
Es lo que se vio en Rocamora donde Mitre siempre tuvo la iniciativa. De los dos fue el único que puso en aprietos a la última línea del rival. El club misionero volvió a fallar en la definición, no sólo por la férrea tarea defensiva sino por algunas deficiencias a la hora de poner la pelota en la zona de los tres palos.

Un regreso y una duda
Una de las falencias de Mitre se observó en la creación de juego, en la posibilidad de desnivelar en el uno a uno.
La ausencia de Klyniauk fue notoria. El volante no pudo jugar por estar con dengue y el cuerpo técnico aguardará hasta último momento para ver si lo pueden incluir al menos en el banco de los relevos.
El que tendrá asegurada su presencia es Morales, otro que podría darle algo más de claridad a la zona de creación. El jugador estuvo entrenando diferenciado pero estaría en condiciones para este trascendente cotejo en Formosa.
El viaje a Formosa
El plantel viajará el sábado con destino a la capital formoseña, donde el domingo en el coqueto estadio de Defensores de Evita se jueguen los 90 minutos en busca de una victoria que lo coloque en la final por el ascenso al Federal “A”.
En caso de igualdad, se definirá desde el punto del penal.




