El sector tabacalero prendió todas sus alarmas luego del anuncio que realizó el programa Nacional de Reconversión de áreas tabacaleras. El organismo informó que ve con buenos ojos modificar los impuestos al tabaco.
De la convocatoria a reunión, participaron todas las empresas cigarrilleras, Massalin Particulares, British American Tobacco, Tabacalera Sarandi, Bronway Technology, For Men, Cigarrillos y Tabacos, la empresa de tabaco para armar TABES sumados a los representantes del ministerio de Economía y la secretaría de Comercio Interior.
Luego de un año en el que el Fondo Especial del Tabaco perdió 7000 millones de pesos, la reacción no fue la esperada ya que el impuesto que se busca eliminar afectaría profundamente a los productores tabacaleros.
¿Cuál es el origen de la propuesta?
Guido Varas, Coordinador del programa Nacional de Reconversión de Áreas Tabacaleras (PRAT) perteneciente al ministerio de Agricultura de la Nación convocó a empresas de la industria tabacalera para plantear la necesidad de modificar los impuestos al tabaco. Sin embargo, los tabacaleros, claves en el proceso, no fueron invitados al encuentro.
Durante la reunión, la CANET (Cámara Argentina Nacional de Empresas de Tabaco, conformada por TABES, Bronway Technology, For Men y Cigarillos y Tabacos) propuso la supresión del impuesto mínimo – un reclamo histórico de las pymes que a fuerza de cautelares y falta de control han crecido sin abonarlo – y subir la tasa de impuestos internos.
Este aspecto, que tiene años en disputa – sólo las empresas multinacionales cumplen hoy con el pago del impuesto mínimo -, se convirtió en el eje central del reclamo ya que lo recaudado por vía del impuesto mínimo se destina al Fondo Especial del Tabaco (FET), y va al sector primario como complemento del precio de tabaco.
El dolor de cabeza que hoy viven los tabacaleros es que el sector primario viene sufriendo desfinanciamiento del FET a causa de la inflación; sólo en 2022 fue de 95% según INDEC mientras que el crecimiento del Fondo fue solo del 45%. Así, el fondo perdió más de 7000 millones de pesos.
El impacto de la medida propuesta por la CANET
La eliminación del monto mínimo fijo por paquete (un 10% sobre precio de venta) permitiría a todas las empresas bajar el precio de venta al público y como consecuencia pondría en riesgo la recaudación del impuesto interno y del FET.
Con la pérdida del monto mínimo el impacto devastaría el sustengo de miles de productores de la región NEA y NOA. Trascendió, entonces, el malestar entre representantes de los productores tabacaleros que indicaron que «no se entiende qué intereses defiende Guido Varas, si los de los productores tabacaleros o los de las empresas que no pagan los impuestos. Nosotros vamos a seguir defendiendo a los productores y el pago de los impuestos establecidos en la ley.”