23 de noviembre de 2025

La FIFA pone la lupa en la llegada Ancelotti a Brasil

El organismo ha solicitado explicaciones a la federación brasileña por el pago de una comisión de 1,2 millones de euros a un intermediario no registrado como agente autorizado

La llegada de Carlo Ancelotti al banco de la selección brasileña, que debía representar un hito histórico para la Confederación Brasileira, se encuentra ahora bajo el escrutinio de la FIFA.

El organismo rector del fútbol mundial ha solicitado explicaciones formales a la federación brasileña por el pago de una comisión de 1,2 millones de euros a un intermediario no registrado como agente autorizado.

El anuncio de la incorporación de Ancelotti se precipitó en diciembre de 2023, cuando Ednaldo Rodrigues, entonces presidente de la CBF, enfrentaba una inminente destitución por decisión judicial. Antes de su salida, Rodrigues contrató a Diego Fernandes, un empresario brasileño radicado en Madrid, para actuar como intermediario en la operación que terminó con el entrenador italiano al frente del seleccionado nacional.

El rol de Fernandes fue clave: encabezó las conversaciones con Ancelotti y su entorno, incluyendo negociaciones con el Real Madrid (con quien el técnico aún tenía contrato vigente) para facilitar una salida anticipada. Según reveló el canal ESPN Brasil, el nombre del empresario figura en el contrato firmado entre la CBF y Ancelotti, pese a no contar con licencia oficial de agente emitida por la FIFA.

La FIFA, tras conocer los detalles de esta operación, activó su unidad de regulación de agentes para determinar si el proceso cumplió con el Reglamento de Agentes, particularmente con lo estipulado en el Artículo 11. Esta norma establece que únicamente los agentes registrados pueden participar en operaciones relacionadas con transferencias o contrataciones. “Cualquier empleado o contratado por la agencia que no sea agente de fútbol no puede prestar servicios de agente de fútbol ni hacer ningún acercamiento a un cliente potencial para firmar un contrato de representación”, indica el reglamento.

Según el sitio brasileño UOL, que tuvo acceso a fuentes cercanas a la investigación, la FIFA exigió a la CBF que entregue antes del 4 de junio (un día antes del debut oficial de Ancelotti frente a Ecuador en Guayaquil) una copia del contrato entre Diego Fernandes y la federación, así como cualquier documentación o mensajes vinculados a la transacción.

Fernández ha sido una figura visible durante todo el proceso. Acompañó a Ancelotti en su vuelo desde Madrid a Río de Janeiro, vistiendo una camiseta retro de la selección brasileña y actuando como representante oficial de la CBF. Este protagonismo ha generado tensiones dentro de la nueva dirigencia de la federación, ahora presidida por Samir Xaud tras unas elecciones disputadas. Según fuentes internas citadas por medios brasileños, existe malestar por la visibilidad pública del empresario y por la agencia de comunicación que contrató para divulgar su papel en la operación.

Aunque Fernandes no cuenta con una licencia de agente, es conocido en el ambiente del fútbol por brindar servicios financieros a futbolistas brasileños en Europa. Su participación en una negociación de esta magnitud, sin las credenciales oficiales requeridas, ha despertado alarmas tanto en Zúrich como en Brasilia.